Hoy es el cumpleaños de mi hermano, un día muy especial y que merece ser tratado como tal. Me cuenta mi madre, que cuando nació, el sol brillaba con fuerza, sin asomo de nubes, un día claro y despejado, como sería más tarde su carácter y semblante. Ese día no nació solo mi hermano, si no mi mejor amigo. Es increíble que con nuestra diferencia de 7 años (casi 8) generamos un lazo tan fuerte e indisoluble. Estar juntos es lo mejor: reímos, jugamos, paseamos, (y como no, también peleamos), compartimos todo lo que nos une, que creo es todo. Somos tan distintos y son esas diferencias las que hacen que este lazo sea aún más fuerte. Yo no me imagino la vida sin él, porque mi compañero me regala apoyo incondicional que para mi es un regalo. Cuando nací, claramente no fui tan bienvenido y costó que compartiera sus espacios y tiempos, así como los cariños, pero finalmente sucumbimos al amor de hermanos y hoy somos lo que somos. Estoy feliz de tenerlo un año más conmigo, espero lleguemos a ser
